Hoy he vuelto a soñar con él. Soñé con aquel momento en el que nuestros labios entraron por primera vez en contacto, y éramos felices, solo estábamos tú y yo en el mundo, los demás no nos importaban. Y de repente, comienzan mis dudas, se esfuman los sentimientos agradables, todo parece de un color algo más triste. Tú te has marchado, me has dicho que no quieres volver a saber nada más de mí y me has dejado sola, completamente sola y ni siquiera me has dado razones convincentes, ni siquiera me has dado razones… Y no sé por qué… Quizás me duela tanto porque nunca había estado tan enganchada a alguien, porque tu sonrisa, tus mensajes y tu rostro me ayudaban a hacer pasar el día más fácil y rápido. Porque a lo mejor cada vez que hablabas o me dirigías la palabra, me daban ganas de callarte inmediatamente con un beso. Y ahora no lo entiendo, no me entra en la cabeza, si ya sé que no significo absolutamente nada para ti, ¿por qué me rallo y estoy pendiente de todos y cada uno de tus movimientos? No losé, quizás me esté volviendo loca, o tal vez sea que cuando me abrazabas, me hacías feliz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario